SOY NADIE
Soy nadie. ¿Tú quién eres?
¿Eres tú también nadie?
Ya somos dos entonces. No lo digas:
lo contarían, sabes.
Qué tristeza ser alguien,
qué público: como una rana
decir el propio nombre junio entero
para una charca admiradora.
Emily Dickinson
NADIE
Donde estoy nunca estuve,
donde estaré no existe.
No hay techo en el mundo
que pueda cobijarme.
A nadie pertenezco,
soy nadie.
De la carne del vacío me alimento.
No tengo destino, ni dios, ni patria.
No soy, no puedo ser.
El mundo dice que existo,
pero el mundo miente.
Sólo existe esa mentira, ese dolor:
la dolorosa mentira de existir.
Bruno Mesa
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10 comentarios:
Emily Dickinson debería ser de lectura obligada. Pero nunca antes de los 25, para que nos demos los tropezones necesarios en nuestra propia cabeza. Su fuerza y humildad, combinadas, nos salvarían después de muchas cosas.
Estoy con Nán.
De hecho, leer ciertas obras debería ser tan obligatorio como sacarse el carnet de identidad. Dickinson estaría entre ellas, sin duda.
No estoy de acuerdo en lo de las lecturas obligadas , quien pone el criterio ,¿ el gobierno ? si gana Rajoy ya me veo de lectura obligada : "las memorias de Franco" , ¿ existen ? . Yo creo en la lectura desordenada y por curiosidad, al final te haces tu biblioteca que no tiene nada que ver con la de otro y esa es la gracia.
¿Carnet de identidad? mierda ya decía yo que me faltaba algo
Doy por supuesto, Francis, que si hay lecturas obligatorias, soy yo el llamado a elegirlas. ;-)
Jajajaja, Francis, cuánta razón tendrías si, en efecto, el llamado a elegirlas (las lecturas obligadas) no fuera Nán, a quien le cederíamos con grato la tarea.
De todos modos, hay tantas cosas absurdas y obligatorias en este mundo, y haría tan poco daño la lectura... ¿Por qué más importante que el ciudadano se ponga al maldito cinturón de seguridad que la lectura de, pongamos por caso, Clarice Lispector?
Tal vez lo óptimo sería que cada cual tuviera sus lecturas obligadas libres... Y que los necesitados de consejo pudieran pediro a alguien con criterios -y ojo, que lo escribo en plural a propósito-.
Sea cmo fuere, detesto las obligaciones.
.YO creo que la Historia de la literatura ya te lleva hacia unas lecturas obligatorias en las que mas tarde o mas temprano acaba todo el mundo, luego hay las lecturas que para uno son más significativas y por ultimo las modas, así tendríamos tres niveles:
Libro de temporada, que puede ser mejor o peor (pongamos los libros premiados, de suplentos literarios....)
Libro intimo, el que te gusta a ti, lo recomiendas a personas afines en gustos y te acompaña durante años
Libro fundamental, es el que a una edad piensas, esto no me lo leo ni loco y luego con los años te lo lees seguro, porque ves que el resto de libros te llevan a ese, aquí podríamos meter los " obligatorios”
PD: Por no ponerme a currar soy capaz de crear teorías pitilleras
Me encanta encontraros aquí, charlando.
:-)
nán, yo había leído a Dickinson, pero comencé a entenderla en La Hormiga Remolona, desde entonces la Dickinson está en mis favoritos.
Flavia, sí, hay lecturas base, y el momento de llegar a ellas no es el mismo para cada persona.
Cada vez estoy más de acuerdo con Francis respecto a la lectura desordenada y por curiosidad.
Respecto a los guías en la lectura, yo tengo algunos como mi librero, nán, Flavia, y Francis desde que descubrí que tenemos muchos favoritos en común. Pero suelo desconfiar de los críticos literarios (exceptuando a Flavia).
Gracias a los tres.
Nunuaria, gracias por tu confianza. (Pero no hay que olvidar que yo soy apasionada y por lo tanto subjetiva y radical).
Respecto a las lecturas: estamos de acuerdo todos/as en que no se puede obligar a leer ciertas obras ni en un momento determinado. Disculpadme: era simplemente una "boutade". Pero hay algo de cierto en que, quizás, si nos obligaran a leer, lo que sea, un número de títulos al año, por poner un ejemplo, igual que nos obligan a sacarnos el carnet de identidad, igual igual, dándole la misma relevancia... el mundo cambiaria un poquito... a mejor.
Sí, Flavia, porque leer nos da una visión más amplia del mundo y, por tanto, nos hace más comprensivos y mejores.
Ya conocía el poema de Dickinson, pero me ha sorprendido el de ese B. Mesa. Reconozco que no sé quién es, y perdonadme por mi ignorancia. Sea quien sea, ese poema es excelente y doloroso.
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